David Toribio

En los últimos he tenido la ocasión de oír varias frases un tanto curiosas.

Conozco varios directivos que suscriben la siguiente afirmación:

“Perder dinero es una inversión necesaria para obtener beneficios”

Comentando esto con un colega ducho en estos menesteres, me contesto de forma clara y contundente:

“Perder dinero es de gilipollas”

Perder dinero nunca es una inversión y no distinguir entre invertir y entre gastar es algo mas habitual de lo deseable en lo tiempos que corren.

Es bastante decepcionante que en la sociedad actual, la formación financiera del grueso de la población es menor de lo que seria deseable, pero es lamentable que los administradores, gestores, de negocios en los que han puesto sus ilusiones no solo los accionistas sino también los empleado, proveedores y otros colaboradores que siempre tienen a su alrededor cualquier proyecto de envergadura, tengan una formación tan absolutamente detestable que les lleve a confundir INVERSION con GASTO.

Gastar nunca es una inversión y hay que contener y medir muy bien cuando vamos a perder en una división/producto/operación y tiene que estar sumamente justificado.

Haya cada cual con su forma de gestionar, pero esto feliz que nos encontremos en un periodo de reajustes y optimizaciones que nos lleven a un uso racional de los servicio, dedicando el grueso de la atención al VALOR y no al HUMO.